5. En presencia de nuestro Diostiemblan la tierra y sus habitantes,y los cerros y las montañas se sacuden.
6. Cuando nuestro Dios se enoja,las piedras se hacen polvo,como si las partiera un rayo;cuando nuestro Dios se enoja,nadie puede mantenerse firme.
7. Nuestro Dios es bondadosoy cuida de los que en él confían.En momentos de angustia,él nos brinda protección.
8. Pero también destruye a sus enemigos;los arrastra como un río desbordado,¡los persigue hasta en la oscuridad!
15. »Miren, habitantes de Judá:¡ya vienen sobre los monteslos que traen buenas noticias!¡Ya es tiempo de que hagan fiestay de que me cumplan sus promesas!Porque yo destruiré a esos malvados,y nunca más los volverán a atacar».