16. Barac, mientras tanto, persiguió a los soldados y a los carros hasta Haróset-goím. Aquel día murieron todos los soldados de Sísara. Ni uno solo quedó con vida.
17. Sísara huyó a pie hasta la carpa de Jael, la esposa de Héber, porque el rey Jabín era amigo de la familia de Héber.
18. Jael salió a recibirlo y le dijo: «Pase por aquí, señor. No tenga miedo».Entonces él entró en la carpa, y ella lo escondió detrás de una cortina.