10. »Los habitantes de este paísson gente malvada;no saben lo que es ser fieles,¡no saben hacer lo bueno,sólo cometen injusticias!Por eso la tierra está bajo maldición:los pastos se han secado,y la tierra es un desierto.
11. »Dios mismo lo afirma:“Los profetas y los sacerdotesson los primeros en hacer el mal;¡hasta en el templocometen terribles maldades!
12. Por eso los voy a castigary caerá sobre ellos la desgracia.¡Nada ni nadie podrá salvarlos!
13. ”¡En Samaria he vistolas cosas más repugnantes!Los profetas predicanen nombre del dios Baaly hacen que mi pueblo me abandone.
14. Pero los profetas de Jerusalénson peores que ellos;no sólo me abandonan,sino que dicen mentirasy ayudan a los malvados.No hay uno solo de ellosque quiera cambiar su conducta.¡Son peores que la gentede Sodoma y de Gomorra!”
15. »Por tanto, el Dios todopoderoso declara en contra de los profetas de Jerusalén:“Ustedes son los responsablesde tanta maldad en este país.Su sufrimiento será terribley su dolor no tendrá fin”.
16. »Y a ustedes, los israelitas, Dios les advierte:“Esos profetas son unos mentirosos,¡no les hagan caso!Yo no les di ningún mensaje,y los sueños que dicen haber tenidoson puro invento de ellos.
17. Aseguran que yo dijeque a los malvadossiempre les irá bien;que a los que me despreciannada malo les pasará.
18. ¡Pero ninguno de esos profetasha estado en mi presencia!¡Ninguno de ellos ha queridooír mi voz y obedecerme!
21. ”Esos profetas salen a predicar,aunque yo no los he enviadoni les he dado ningún mensaje.
22. Si hubieran estado en mi presencia,habrían anunciado mi mensaje;habrían invitado a mi puebloa dejar su mala conducta.
25. ”Ya he escuchado las mentiras de esos profetas. Según ellos, han soñado que les he dado un mensaje.
26. ¡Eso lo inventaron ellos! ¿Cuándo dejarán de mentir?
27. Lo que quieren es que mi pueblo me olvide, como me olvidaron sus antepasados por adorar al dios Baal.
28. ”Yo, el Dios de Israel, les digo: si un profeta tiene un sueño, que lo cuente; si recibe un mensaje de mi parte, que lo comunique al pie de la letra. ¡Pero que se dejen de cuentos!