25. Los egipcios respondieron:—Señor gobernador: ¡usted nos ha salvado la vida! ¡Denos ahora el privilegio de ser esclavos del rey!
26. José estableció como ley en Egipto que la quinta parte de las cosechas sería para el rey. Y hasta el día en que esto se escribió, esta ley se ha respetado. Las únicas tierras que no llegaron a ser del rey fueron las de los sacerdotes.
27. Los israelitas se establecieron en el territorio egipcio de Gosen. Allí compraron terrenos, y llegaron a tener muchos hijos.
28. Jacob vivió en Egipto diecisiete años, así que alcanzó a vivir ciento cuarenta y siete años.
29. Cuando se acercaba la hora de su muerte, mandó llamar a su hijo José y le dijo:—Voy a pedirte un favor, y júrame que lo cumplirás. Si de veras me quieres, prométeme que no me enterrarás en Egipto.
30. Cuando yo muera, saca mis restos de aquí y entiérralos donde están enterrados mis antepasados.Y José le prometió hacerlo así.
31. Pero Jacob insistió:—¡Júramelo!José se lo juró. Entonces su padre se inclinó sobre la cabecera de su cama, y dijo una oración.