Génesis 41:30-31-42 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)

4. Y de repente, ¡las flacas y feas se comieron a las gordas y bonitas!En ese momento el rey se despertó.

5. Pero volvió a dormirse, y tuvo otro sueño. Soñó que de un mismo tallo brotaron siete espigas, verdes y llenas de trigo.

6. Tras ellas brotaron otras siete espigas, sin trigo y marchitadas por el viento del desierto.

7. ¡Y las espigas secas se tragaron a las verdes y llenas de trigo!El rey se despertó, y vio que se trataba de un sueño.

8. Sin embargo, al levantarse estaba tan preocupado que mandó llamar a todos los magos y sabios de Egipto. Les contó sus sueños, pero ninguno pudo decirle lo que significaban.

9. De pronto, el jefe de los coperos se acordó de José y le dijo al rey:—¡Soy un malagradecido!

30-31. pero después vendrán siete años en que no habrá qué comer. Cuando eso suceda, nadie se acordará de la abundancia que antes hubo. Habrá tanta hambre que acabará con el país.

32. Su Majestad tuvo el mismo sueño en dos formas distintas, y eso significa que Dios ha decidido hacerlo, y lo va a hacer muy pronto.

33. »Yo le sugiero a Su Majestad que busque a alguien muy sabio e inteligente, y que lo ponga a cargo del país.

34. También le sugiero que nombre gente que se encargue de recoger la quinta parte de las cosechas durante los siete años de abundancia.

35. Durante los siete años buenos que van a venir, Su Majestad debe darles autoridad para que junten y almacenen en las ciudades todos los alimentos y el trigo.

36. Ese alimento quedará guardado, para usarlo durante los siete años de hambre que habrá en Egipto. Así el país no quedará arruinado por el hambre.

37. El rey y sus consejeros estuvieron de acuerdo en que el plan de José era bueno,

38. y el rey les comentó: «En ningún lado vamos a encontrar a nadie más inteligente que este joven».

39-41. Por eso le dijo a José:—Dios te ha dado a conocer todo esto, y eso quiere decir que no hay nadie tan sabio e inteligente como tú. Por eso, a partir de este momento quedas a cargo de mi palacio y de todo mi pueblo. Todos en Egipto tendrán que obedecerte. Sólo yo tendré más poder que tú, porque soy el rey.

42. Después, el rey se quitó el anillo que usaba para sellar sus cartas, y se lo puso a José. Luego ordenó que lo vistieran con ropas de lino fino y que le pusieran un collar de oro,

Génesis 41