Génesis 38:18-25 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)

18. —¿Y qué quieres que te deje? —preguntó Judá.—Pues déjame tu sello con todo y cordón, y la vara que llevas en la mano —respondió ella.Judá aceptó sus condiciones, y tuvo relaciones sexuales con ella, y ella quedó embarazada.

19. Tan pronto como Judá se marchó, ella se quitó el velo y volvió a ponerse las ropas de luto.

20. Más tarde, cuando Judá mandó a su amigo Hirá para entregar el cabrito y recoger lo que le había dejado a Tamar, su amigo ya no la encontró.

21. Entonces les preguntó a los que vivían allí:—¿Dónde está la prostituta que acostumbra sentarse junto al camino de Enaim?Ellos contestaron:—Aquí nunca ha habido ninguna prostituta.

22. El amigo de Judá regresó y le dijo:—No encontré a esa mujer. Los de ese lugar me aseguran que allí no ha habido ninguna prostituta.

23. Judá respondió:—¡Pues que se quede con todo! Pero nadie podrá decir que no cumplo mi palabra. Yo te envié con el cabrito, y tú ya no la encontraste.

24. Como a los tres meses, alguien fue a decirle a Judá:—Seguramente tu nuera Tamar ha tenido relaciones con alguien, pues resulta que está embarazada.Entonces Judá exclamó:—¡Échenla fuera, y quémenla viva!

25. Cuando la estaban sacando, Tamar mandó a decirle a su suegro: «El dueño de todo esto fue quien me dejó embarazada. Fíjate bien, tal vez sepas quién es el dueño».

Génesis 38