1. Dios también me dijo:
2-4. «Habla con los israelitas y ponlos a pensar en esta comparación, a ver si la entienden:“Había un águila muy grande,de anchas alas y coloridas plumas.Esa águila fue al monte Líbanoy de la punta de un árbolcortó la rama más alta.Luego fue a un país de comerciantes,y allí plantó la rama.
5. De ese país tomó una semilla,y fue a sembrarla en buena tierra.La plantó junto a un río,como se plantan los sauces.
12-14. «Pregúntale a esta gente rebelde si sabe lo que significa la comparación. Si no lo sabe, explícale que, cuando el rey de Babilonia vino a Jerusalén, hizo prisioneros al rey de Judá y a sus principales jefes, y se los llevó a su país. Sin embargo, hizo un trato con uno de ellos, que era de la familia del rey, y lo hizo jurar que no lo traicionaría. Mediante ese trato, el rey de Babilonia esperaba que los de Judá no se rebelaran, sino que cumplieran fielmente el pacto.
16-18. ¡Claro que no! Yo soy el Dios de Israel, y les juro que ese jefe de Judá morirá en Babilonia. Y morirá porque no supo cumplir su palabra, ¡porque no respetó el trato que hizo con el rey que lo dejó seguir reinando!»Cuando los babilonios ataquen a Jerusalén, y construyan rampas y escaleras para conquistar la ciudad, y maten a mucha gente, de nada le servirá el gran ejército que le mandó el rey de Egipto. ¡Ni siquiera ese jefe saldrá con vida!