4-5. Cuando la fundaron, fue como una niña abandonada al nacer. Nadie se interesó por ella, ni la cuidó ni le cortó el ombligo. Nadie la bañó, ni la frotó con sal, ni la envolvió en pañales. Al contrario, la abandonaron como si fuera basura.
6. ”Yo pasaba por ahí y la vi en el suelo, revolcándose en su propia sangre. Parecía una niña abandonada. Pensé que merecía una oportunidad,
7. y la ayudé a crecer. La ciudad creció; fue como ver a la niña convertirse en una joven muy hermosa. Le crecieron los pechos, y le salió el vello de mujer. Aun así, estaba totalmente desnuda.
35-36. ”Por lo tanto, ciudad infiel, presta atención a lo que voy a decirte: Como no te dio vergüenza adorar descaradamente a los ídolos de otras naciones, y como les ofreciste la sangre de tus hijos,
37. voy a reunir a todas esas naciones, y delante de todas ellas te humillaré.
38. ”Te voy a juzgar como a una prostituta y asesina. Es tanto mi enojo que te condenaré a morir,
39. y serán esas naciones amigas tuyas las que cumplan la sentencia. Ellas derribarán todos los altares que hiciste para adorar a sus ídolos. Te quitarán tus joyas, te arrancarán tus riquezas y te dejarán en la pobreza.
40. Luego, esas naciones le dirán a la gente que te acuchille y te mate a pedradas,
41. y que les prenda fuego a tus casas. Así cumplirán tus amigas la sentencia contra ti, delante de muchas otras naciones. Sólo así dejarás de portarte como una prostituta, y ya no les darás tus riquezas a los ídolos de esas naciones.
42. Una vez que se me pase el enojo, y que se hayan calmado mis celos por ti, volveré a estar tranquilo.
43. Pero yo te castigaré, porque has sido una ingrata. Tú, Jerusalén, te olvidaste de todo lo que hice por ti cuando no eras una ciudad importante. Me hiciste enojar con tus acciones tan repugnantes. Te juro que así es.
44. ”La gente dirá que en ti se cumple el dicho: ‘De tal madre, tal hija’,