7. «Ya no les den paja a los israelitas para los ladrillos que tienen que hacer. Déjenlos que vayan ellos a recogerla.
8. Pero exíjanles que hagan la misma cantidad de ladrillos; ¡ni uno menos! Estos israelitas son unos haraganes; por eso andan gritando que los dejemos ir al desierto para adorar a su Dios.
9. Ustedes háganlos trabajar más todavía. Manténgalos tan ocupados que no tengan tiempo de creer en las mentiras de Moisés y de Aarón».
10. Los capataces y los jefes de trabajo fueron a decirles a los israelitas:«El rey de Egipto nos manda a decirles que ya no vamos a darles paja para los ladrillos,
11. sino que ustedes tienen que ir a buscarla y recogerla donde puedan. Pero deben entregar la misma cantidad de ladrillos de siempre».