2. Allí Dios se le apareció en medio de un arbusto que ardía en llamas. A Moisés le sorprendió ver que el arbusto estaba en llamas, pero no se quemaba.
3. Y dijo: «¡Qué extraño! ¡Voy a ver por qué no se quema ese arbusto!»
4. Cuando Dios vio que Moisés se acercaba, le gritó:—¡Detente Moisés!Moisés contestó:—¡Qué pasa, Señor!
5. Dios le dijo:—¡No te acerques más! ¡Quítate las sandalias, porque estás en mi presencia!
6. Yo soy el Dios de tus antepasados; yo soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob.Al oír esto, Moisés no se atrevió a mirar a Dios y se tapó la cara.
14-16. Dios le contestó:—Diles que soy el Dios eterno, y que me llamo Yo soy. Diles a todos que yo soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, los antepasados de ustedes.»Así que ve a Egipto y reúne a los jefes de Israel. Cuéntales que yo, su Dios, me aparecí ante ti, y que sé muy bien cómo sufren en Egipto.
17. Diles que les prometo librarlos de su esclavitud, sacarlos de Egipto, y llevarlos a Canaán, país donde viven pueblos que no me conocen. ¡Es un país tan rico que siempre hay abundancia de alimentos!
18. »Yo sé que los jefes te harán caso, así que tú y ellos se presentarán ante el rey de Egipto y le dirán: “Nuestro Dios ha venido a encontrarnos. Queremos que Su Majestad nos deje ir al desierto, hasta donde lleguemos en tres días. Allí adoraremos a nuestro Dios y le presentaremos ofrendas”.
19. »Claro, yo sé que el rey no va a dejarlos ir, pero lo obligaré a hacerlo.
20. Usaré mi poder y haré cosas increíbles, con las que destruiré a los egipcios. Sólo entonces los dejará ir.