1. Yo, que estoy preso por servir al Señor Jesús, les ruego que vivan como deben vivir quienes, como ustedes, han sido llamados a formar parte del pueblo de Dios.
2. Sean humildes, amables y pacientes, y bríndense apoyo, por amor, los unos a los otros.
3. Hagan todo lo posible por vivir en paz, para que no pierdan la unidad que el Espíritu les dio.
4. Sólo hay una iglesia, sólo hay un Espíritu, y Dios los llamó a una sola esperanza de salvación.
5. Sólo hay un Señor, una fe y un bautismo.
23-24. Ustedes deben cambiar completamente su manera de pensar, y ser honestos y santos de verdad, como corresponde a personas que Dios ha vuelto a crear, para ser como él.