1. Así fue como David decidió que allí se construiría el templo de Dios, y el altar para que Israel presentara las ofrendas quemadas.
6. Después de esto, le encargó a su hijo Salomón que construyera el templo del Dios de Israel,
7. y le dijo:«Hijo mío, yo quería construir un templo para honrar a mi Dios.
8. Pero él no me lo permitió, porque he participado en muchas batallas y he matado a mucha gente.»Sin embargo, Dios me prometió
9. que tendría un hijo amante de la paz, y que no tendría problemas con sus enemigos, sino que durante todo su reinado Israel viviría en paz y tranquilidad. Por eso tu nombre es Salomón.
10. »Dios me dijo que a ti sí te permitiría construir el templo. Él será como un padre para ti, y te tratará como a un hijo; hará que tu reino en Israel sea firme y permanezca para siempre.