4. Tenías los párpados de mis ojos abiertos ; estaba yo quebrantado, y no hablaba.
5. Consideraba los días desde el principio, los años de los siglos.
6. Me acordaba de mis canciones de noche; meditaba con mi corazón, y mi espíritu inquiría.
7. ¿Desechará el Señor para siempre, y no volverá más a amar?
8. ¿Se ha acabado para siempre su misericordia? ¿Se ha acabado la palabra suya para generación y generación?