4. Anduvieron perdidos por el desierto, por la soledad sin camino, sin hallar ciudad en dónde vivir.
5. Hambrientos y sedientos, su alma desfallecía en ellos.
6. Y clamaron al SEÑOR en su angustia, los libró de sus aflicciones.
7. Los dirigió por camino derecho, para que viniesen a ciudad de habitación.
8. Alaben al SEÑOR por su misericordia; y sus maravillas para con los hijos de los hombres.
9. Porque sació al alma menesterosa, y llenó de bien al alma hambrienta.