5. Y estando aún él hablando, he aquí una nube de luz que los cubrió; y una voz de la nube, que dijo: Este es mi Hijo amado, en el cual tomo contentamiento; a El oíd.
6. Y oyendo esto los discípulos, cayeron sobre sus rostros, y temieron en gran manera.
7. Entonces Jesús llegando, los tocó, y dijo: Levantaos, y no temáis.
8. Y alzando ellos sus ojos, a nadie vieron, sino a Jesús solo.
9. Y como descendieron del monte, les mandó Jesús, diciendo: No digáis a nadie la visión, hasta que el Hijo del hombre resucite de los muertos.