30. El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no coge, derrama.
31. Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no será perdonada a los hombres.
32. Y cualquiera que hablare contra el Hijo del hombre, le será perdonado; mas cualquiera que hablare contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo, ni en el venidero.
33. O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol podrido, y su fruto podrido; porque por el fruto es conocido el árbol.
34. Generación de víboras, ¿cómo podéis hablar bien, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.