Marcos 14:3-8 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

3. Y estando él en Betania, en casa de Simón el leproso, y sentado a la mesa, vino una mujer teniendo un alabastro de ungüento de nardo espique de mucho precio; y quebrando el alabastro, se lo derramó sobre su cabeza.

4. Y hubo algunos que se enojaron dentro de sí, y dijeron: ¿Para qué se ha hecho este desperdicio de ungüento?

5. Porque podía esto ser vendido por más de trescientos denarios, y darse a los pobres. Y murmuraban contra ella.

6. Mas Jesús dijo: Dejadla; ¿por qué la fatigáis? Buena obra me ha hecho;

7. que siempre tendréis los pobres con vosotros, y cuando quisiereis les podréis hacer bien; mas a mí no siempre me tendréis.

8. Esta ha hecho lo que podía; porque se ha anticipado a ungir mi cuerpo para la sepultura.

Marcos 14