16. Mas seréis entregados aun de vuestros padres, y hermanos, y parientes, y amigos; y matarán a algunos de vosotros.
17. Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre.
18. Mas un pelo de vuestra cabeza no perecerá.
19. En vuestra paciencia poseeréis vuestras almas.
20. Y cuando viereis a Jerusalén cercada de ejércitos, sabed entonces que su destrucción ha llegado.