30. y el erizo, y el lagarto, y el caracol, y la babosa, y el topo.
31. Estos tendréis por inmundos de todos los animales; cualquiera que los tocare, cuando estuvieren muertos, será inmundo hasta la tarde.
32. Y todo aquello sobre que cayere alguno de ellos después de muertos, será inmundo; así vaso de madera, como vestido, o piel, o saco, cualquier instrumento con que se hace obra, será metido en agua, y será inmundo hasta la tarde, y así será limpio.
33. Y todo vaso de barro dentro del cual cayere alguno de ellos, todo lo que estuviere en él será inmundo, y quebraréis el vaso .
34. Toda vianda que se come, sobre la cual viniere el agua de tales vasos , será inmunda; y toda bebida que se bebiere, será en todos esos vasos inmunda.