1. Mejor es el buen nombre que el buen ungüento; y el día de la muerte que el día del nacimiento.
2. Mejor es ir a la casa del luto que a la casa del convite; porque aquello es el fin de todos los hombres; y el que vive se advertirá.
3. Mejor es el pesar que la risa; porque con la tristeza del rostro se enmendará el corazón.