Deuteronomio 5:26-31 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

26. Porque, ¿qué es toda carne, para que oiga la voz del Dios viviente que habla de en medio del fuego, como nosotros la oímos , y viva?

27. Llega tú, y oye todas las cosas que dijere el SEÑOR nuestro Dios; y tú nos dirás todo lo que el SEÑOR nuestro Dios te dijere, y nosotros oiremos y haremos.

28. Y oyó el SEÑOR la voz de vuestras palabras, cuando me hablabais; y me dijo el SEÑOR: He oído la voz de las palabras de este pueblo, que ellos te han hablado; han presentado bien todo lo que han dicho.

29. ¡Quién diese que tuviesen tal corazón, que me temiesen, y guardasen todos los días todos mis mandamientos, para que a ellos y a sus hijos les fuese bien para siempre!

30. Ve, diles: Volveos a vuestras tiendas.

31. Y tú estáte aquí conmigo, para que te diga todos los mandamientos, y estatutos, y derechos que tú les enseñarás que los hagan en la tierra que yo les doy para que la hereden.

Deuteronomio 5