Salmos 119:7-26 Reina Valera Gómez (RVG)

7. Te alabaré con rectitud de corazón, cuando aprendiere los juicios de tu justicia.

8. Tus estatutos guardaré; no me dejes enteramente.

9. BET. ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.

10. Con todo mi corazón te he buscado; no me dejes divagar de tus mandamientos.

11. En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti.

12. Bendito tú, oh Jehová; enséñame tus estatutos.

13. Con mis labios he contado todos los juicios de tu boca.

14. 8 Se anticiparon mis ojos a las vigilias de la noche, para meditar en tu palabra.

15. En tus mandamientos meditaré, consideraré tus caminos.

16. Me deleitaré en tus estatutos; no me olvidaré de tus palabras.

17. GIMEL. Haz bien a tu siervo; para que viva y guarde tu palabra.

18. Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley.

19. Advenedizo soy yo en la tierra; no encubras de mí tus mandamientos.

20. Quebrantada está mi alma de desear tus juicios en todo tiempo.

21. Destruiste a los soberbios malditos, que se desvían de tus mandamientos.

22. Aparta de mí oprobio y menosprecio; porque tus testimonios he guardado.

23. Príncipes también se sentaron y hablaron contra mí; mas tu siervo meditaba en tus estatutos.

24. Pues tus testimonios son mi delicia, y mis consejeros.

25. DALET. Mi alma está pegada al polvo; vivifícame según tu palabra.

26. Mis caminos te conté, y me has respondido: Enséñame tus estatutos.

Salmos 119