Marcos 4:32-41 Reina Valera Gómez (RVG)

32. pero después de sembrado, crece, y se hace la más grande de todas las hortalizas, y echa grandes ramas, de manera que las aves del cielo pueden anidar bajo su sombra.

33. Y con muchas parábolas semejantes les hablaba la palabra, conforme ellos podían oír.

34. Y sin parábola no les hablaba, mas a sus discípulos en privado les aclaraba todas las cosas.

35. Y aquel día, cuando cayó la tarde, les dijo: Pasemos al otro lado.

36. Y despidiendo a la multitud, le recibieron como estaba en la barca; y había también con Él otras barcas.

37. Y se levantó una gran tempestad de viento, y las olas azotaban la barca, de manera que ya se anegaba.

38. Y Él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal, y despertándole, le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?

39. Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento. Y se hizo grande bonanza.

40. Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo es que no tenéis fe?

41. Y temieron en gran manera, y se decían el uno al otro: ¿Qué clase de hombre es Éste, que aun el viento y el mar le obedecen?

Marcos 4