1. Y levantando la vista, vio a los ricos que echaban sus ofrendas en el arca de las ofrendas.
2. Y vio también a una viuda pobre, que echaba allí dos blancas.
3. Y dijo: En verdad os digo que esta viuda pobre echó más que todos.
4. Porque todos éstos, de lo que les sobra echaron para las ofrendas de Dios; pero ésta de su pobreza echó todo el sustento que tenía.
5. Y a unos que hablaban del templo, de que estaba adornado de hermosas piedras y dones, dijo:
6. En cuanto a estas cosas que veis, días vendrán que no quedará piedra sobre piedra que no sea derribada.