Lucas 2:28-35 Reina Valera Gómez (RVG)

28. él entonces le tomó en sus brazos, y bendijo a Dios, diciendo:

29. Señor, ahora despides a tu siervo en paz, conforme a tu palabra;

30. Porque han visto mis ojos tu salvación,

31. La cual has preparado en presencia de todos los pueblos;

32. luz para revelación a los gentiles, y la gloria de tu pueblo Israel.

33. Y José y su madre estaban maravillados de las cosas que se decían de Él.

34. Y los bendijo Simeón, y dijo a su madre María: He aquí, Éste es puesto para caída y levantamiento de muchos en Israel; y por señal a la que será contradicho

35. (Y una espada traspasará también tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos de muchos corazones.

Lucas 2