13. Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?
14. Y estaba Él lanzando un demonio, el cual era mudo; y aconteció que salido fuera el demonio, el mudo habló y la gente se maravillaba.
15. Mas algunos de ellos decían: Por Belcebú, príncipe de los demonios, echa fuera los demonios.
16. Y otros, tentándole, le pedían señal del cielo.