9. Y Micaía le dijo: ¿De dónde vienes? Y el levita le respondió: Soy de Belén de Judá, y voy a vivir donde encuentre lugar.
10. Entonces Micaía le dijo: Quédate en mi casa, y me serás en lugar de padre y sacerdote; y yo te daré diez siclos de plata por año, y vestidura, y tu comida. Y el levita se quedó.
11. Acordó pues el levita en morar con aquel hombre, y él lo tenía como a uno de sus hijos.
12. Y Micaía consagró al levita, y aquel joven le servía de sacerdote, y estaba en casa de Micaía.
13. Entonces Micaía dijo: Ahora sé que Jehová me hará bien, porque tengo un levita por sacerdote.