4. Y yo dije: Echado soy de delante de tus ojos: Mas aun veré tu santo templo.
5. Las aguas me rodearon hasta el alma, me rodeó el abismo; Las algas se enredaron a mi cabeza.
6. Descendí a los cimientos de los montes; La tierra echó sus cerraduras sobre mí para siempre: Mas tú sacaste mi vida de la corrupción, oh Jehová Dios mío.
7. Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé de Jehová; Y mi oración entró hasta ti en tu santo templo.