Hechos 5:1-8 Reina Valera Gómez (RVG)

1. Pero un varón llamado Ananías, con Safira su esposa, vendió una heredad,

2. y retuvo parte del precio, sabiéndolo también su esposa; y trayendo una parte, la puso a los pies de los apóstoles.

3. Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué ha llenado Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y te quedases con parte del precio de la heredad?

4. Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios.

5. Entonces Ananías, oyendo estas palabras, cayó y expiró. Y vino gran temor sobre todos los que lo oyeron.

6. Y levantándose los jóvenes, lo envolvieron, y sacándolo, lo sepultaron.

7. Y pasado un lapso como de tres horas, entró también su esposa, no sabiendo lo que había acontecido.

8. Entonces Pedro le dijo: Dime, ¿vendisteis en tanto la heredad? Y ella dijo: Sí, en tanto.

Hechos 5