Deuteronomio 28:41-51 Reina Valera Gómez (RVG)

41. Hijos e hijas engendrarás, y no serán para ti, porque irán en cautiverio.

42. Todos tus árboles y el fruto de tu tierra serán consumidos por la langosta.

43. El extranjero que esté en medio de ti se elevará sobre ti muy alto, y tú descenderás muy bajo.

44. Él te prestará a ti, y tú no le prestarás a él; él será la cabeza y tú serás la cola.

45. Y vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te perseguirán, y te alcanzarán hasta que perezcas; por cuanto no habrás atendido a la voz de Jehová tu Dios, para guardar sus mandamientos y sus estatutos, que Él te mandó:

46. Y serán en ti por señal y por maravilla, y en tu simiente para siempre.

47. Por cuanto no serviste a Jehová tu Dios con alegría y con gozo de corazón, por la abundancia de todas las cosas;

48. por tanto, servirás a tus enemigos que Jehová enviará contra ti, con hambre y con sed y con desnudez, y con escasez de todas las cosas; y Él pondrá yugo de hierro sobre tu cuello, hasta destruirte.

49. Jehová traerá contra ti una nación de lejos, desde lo último de la tierra, que vuele como águila, nación cuya lengua no entenderás;

50. gente fiera de rostro, que no tendrá respeto al anciano, ni perdonará al niño;

51. y comerá el fruto de tu ganado y el fruto de tu tierra, hasta que perezcas: y no te dejará grano, ni mosto, ni aceite, ni la cría de tus vacas, ni los rebaños de tus ovejas, hasta destruirte.

Deuteronomio 28