14. Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe.
15. Y además somos hallados falsos testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios, que Él resucitó a Cristo; al cual no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan.
16. Porque si los muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó.
17. Y si Cristo no resucitó, vana es vuestra fe; aún estáis en vuestros pecados.
18. Entonces también los que durmieron en Cristo perecieron.
19. Si sólo en esta vida esperamos en Cristo, somos los más miserables de todos los hombres.
20. Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho.
21. Y por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.
22. Porque así como en Adán todos mueren, así también en Cristo todos serán vivificados.
23. Pero cada uno en su debido orden: Cristo las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.
24. Luego vendrá el fin; cuando haya entregado el reino al Dios y Padre, cuando haya abatido todo dominio y toda autoridad y poder.
25. Porque es menester que Él reine, hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies.
26. Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte.
27. Porque todas las cosas sujetó debajo de sus pies. Pero cuando dice: Todas las cosas son sujetadas a Él, claramente se exceptúa a Aquél que sujetó a Él todas las cosas.
28. Y cuando todas las cosas le estén sujetas, entonces también el Hijo mismo se sujetará a Aquél que sujetó a Él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos.
29. De otro modo, ¿qué harán los que se bautizan por los muertos, si en ninguna manera los muertos resucitan? ¿Por qué, pues, se bautizan por los muertos?
30. ¿Y por qué nosotros peligramos a toda hora?