2. Sabéis que vosotros erais gentiles, llevados, como se os llevaba, a los ídolos mudos.
3. Por tanto, os hago saber que nadie que hable por el Espíritu de Dios, llama anatema a Jesús; y nadie puede llamar a Jesús Señor, sino por el Espíritu Santo.
4. Ahora bien, hay diversidad de dones; pero el mismo Espíritu es.
5. Y hay diversidad de ministerios; pero el mismo Señor es.
6. Y hay diversidad de operaciones; pero es el mismo Dios el que hace todas las cosas en todos.
7. Pero a cada uno le es dada manifestación del Espíritu para provecho.
8. Porque a la verdad, a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de conocimiento por el mismo Espíritu;
9. a otro, fe por el mismo Espíritu, y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu;
10. a otro, el hacer milagros, y a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas.