6. Sabiendo esto, que nuestro viejo hombre juntamente fué crucificado con él, para que el cuerpo del pecado sea deshecho, á fin de que no sirvamos más al pecado.
7. Porque el que es muerto, justificado es del pecado.
8. Y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con él;
9. Sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de entre los muertos, ya no muere: la muerte no se enseñoreará más de él.
10. Porque el haber muerto, al pecado murió una vez; mas el vivir, á Dios vive.
11. Así también vosotros, pensad que de cierto estáis muertos al pecado, mas vivos á Dios en Cristo Jesús Señor nuestro.