Mateo 25:25-36 Reina-Valera Antigua (RVES)

25. Y tuve miedo, y fuí, y escondí tu talento en la tierra: he aquí tienes lo que es tuyo.

26. Y respondiendo su señor, le dijo: Malo y negligente siervo, sabías que siego donde no sembré y que recojo donde no esparcí;

27. Por tanto te convenía dar mi dinero á los banqueros, y viniendo yo, hubiera recibido lo que es mío con usura.

28. Quitadle pues el talento, y dadlo al que tiene diez talentos.

29. Porque á cualquiera que tuviere, le será dado, y tendrá más; y al que no tuviere, aun lo que tiene le será quitado.

30. Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera: allí será el lloro y el crujir de dientes.

31. Y cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria.

32. Y serán reunidas delante de él todas las gentes: y los apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.

33. Y pondrá las ovejas á su derecha, y los cabritos á la izquierda.

34. Entonces el Rey dirá á los que estarán á su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.

35. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fuí huésped, y me recogisteis;

36. Desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; estuve en la cárcel, y vinisteis á mí.

Mateo 25