7. Y le acechaban los escribas y los Fariseos, si sanaría en sábado, por hallar de qué le acusasen.
8. Mas él sabía los pensamientos de ellos; y dijo al hombre que tenía la mano seca: Levántate, y ponte en medio. Y él levantándose, se puso en pie.
9. Entonces Jesús les dice: Os preguntaré un cosa: ¿Es lícito en sábados hacer bien, ó hacer mal? ¿salvar la vida, ó quitarla?
10. Y mirándolos á todos alrededor, dice al hombre: Extiende tu mano. Y él lo hizo así, y su mano fué restaurada.
11. Y ellos se llenaron de rabia; y hablaban los unos á los otros qué harían á Jesús.