5. Nunca tal acontezca que yo os justifique: Hasta morir no quitaré de mí mi integridad.
6. Mi justicia tengo asida, y no la cederé: No me reprochará mi corazón en el tiempo de mi vida.
7. Sea como el impío mi enemigo, Y como el inicuo mi adversario.
8. Porque ¿cuál es la esperanza del hipócrita, por mucho que hubiere robado, Cuando Dios arrebatare su alma?
9. ¿Oirá Dios su clamor Cuando la tribulación sobre él viniere?