6. Tus dientes, como manada de ovejas Que suben del lavadero, Todas con crías mellizas, Y estéril no hay entre ellas.
7. Como cachos de granada son tus sienes Entre tus guedejas.
8. Sesenta son las reinas, y ochenta las concubinas, Y las doncellas sin cuento:
9. Mas una es la paloma mía, la perfecta mía; Unica es á su madre, Escogida á la que la engendró. Viéronla las doncellas, y llamáronla bienaventurada; Las reinas y las concubinas, y la alabaron.