10. Mas ahora es manifestada por la aparición de nuestro Salvador Jesucristo, el cual quitó la muerte, y sacó á la luz la vida y la inmortalidad por el evangelio;
11. Del cual yo soy puesto predicador, y apóstol, y maestro de los Gentiles.
12. Por lo cual asimismo padezco esto: mas no me avergüenzo; porque yo sé á quien he creído, y estoy cierto que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día.
13. Retén la forma de las sanas palabras que de mi oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús.
14. Guarda el buen depósito por el Espíritu Santo que habita en nosotros.