27. Antes lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar á los sabios; y lo flaco del mundo escogió Dios, para avergonzar lo fuerte;
28. Y lo vil del mundo y lo menos preciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es:
29. Para que ninguna carne se jacte en su presencia.
30. Mas de él sois vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, y justificación, y santificación, y redención:
31. Para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.