6. Y a la medianoche se oyó un clamor: ¡Aquí viene el esposo; salid a recibirle!
7. Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y arreglaron sus lámparas.
8. Y las insensatas dijeron a las prudentes: Dadnos de vuestro aceite; porque nuestras lámparas se apagan.
9. Mas las prudentes respondieron diciendo: Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que venden, y comprad para vosotras mismas.
10. Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta.