San Mateo 22:32-46 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

32. Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob? Dios no es Dios de muertos, sino de vivos.

33. Oyendo esto la gente, se admiraba de su doctrina.

34. Entonces los fariseos, oyendo que había hecho callar a los saduceos, se juntaron a una.

35. Y uno de ellos, intérprete de la ley, preguntó por tentarle, diciendo:

36. Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley?

37. Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.

38. Éste es el primero y grande mandamiento.

39. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

40. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.

41. Y estando juntos los fariseos, Jesús les preguntó,

42. diciendo: ¿Qué pensáis del Cristo? ¿De quién es hijo? Le dijeron: De David.

43. Él les dijo: ¿Pues cómo David en el Espíritu le llama Señor, diciendo:

44. Dijo el Señor a mi Señor:Siéntate a mi derecha,Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?

45. Pues si David le llama Señor, ¿cómo es su hijo?

46. Y nadie le podía responder palabra; ni osó alguno desde aquel día preguntarle más.

San Mateo 22