San Mateo 12:11-25 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

11. Él les dijo: ¿Qué hombre habrá de vosotros, que tenga una oveja, y si ésta cayere en un hoyo en día de reposo, no le eche mano, y la levante?

12. Pues ¿cuánto más vale un hombre que una oveja? Por consiguiente, es lícito hacer el bien en los días de reposo.

13. Entonces dijo a aquel hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y le fue restaurada sana como la otra.

14. Y salidos los fariseos, tuvieron consejo contra Jesús para destruirle.

15. Sabiendo esto Jesús, se apartó de allí; y le siguió mucha gente, y sanaba a todos,

16. y les encargaba rigurosamente que no le descubriesen;

17. para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo:

18. He aquí mi siervo, a quien he escogido;Mi Amado, en quien se agrada mi alma;Pondré mi Espíritu sobre él,Y a los gentiles anunciará juicio.

19. No contenderá, ni voceará,Ni nadie oirá en las calles su voz.

20. La caña cascada no quebrará,Y el pábilo que humea no apagará,Hasta que saque a victoria el juicio.

21. Y en su nombre esperarán los gentiles.

22. Entonces fue traído a él un endemoniado, ciego y mudo; y le sanó, de tal manera que el ciego y mudo veía y hablaba.

23. Y toda la gente estaba atónita, y decía: ¿Será éste aquel Hijo de David?

24. Mas los fariseos, al oírlo, decían: Éste no echa fuera los demonios sino por Beelzebú, príncipe de los demonios.

25. Sabiendo Jesús los pensamientos de ellos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo, es asolado, y toda ciudad o casa dividida contra sí misma, no permanecerá.

San Mateo 12