9. Y ya también el hacha está puesta a la raíz de los árboles; por tanto, todo árbol que no da buen fruto se corta y se echa en el fuego.
10. Y la gente le preguntaba, diciendo: Entonces, ¿qué haremos?
11. Y respondiendo, les dijo: El que tiene dos túnicas, dé al que no tiene; y el que tiene qué comer, haga lo mismo.
12. Vinieron también unos publicanos para ser bautizados, y le dijeron: Maestro, ¿qué haremos?
13. Él les dijo: No exijáis más de lo que os está ordenado.
14. También le preguntaron unos soldados, diciendo: Y nosotros, ¿qué haremos? Y les dijo: No hagáis extorsión a nadie, ni calumniéis; y contentaos con vuestro salario.
15. Como el pueblo estaba en expectativa, preguntándose todos en sus corazones si acaso Juan sería el Cristo,
16. respondió Juan, diciendo a todos: Yo a la verdad os bautizo en agua; pero viene uno más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado; él os bautizará en Espíritu Santo y fuego.
17. Su aventador está en su mano, y limpiará su era, y recogerá el trigo en su granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará.