2. Mejor es ir a la casa del luto que a la casa del banquete; porque aquello es el fin de todos los hombres, y el que vive lo pondrá en su corazón.
3. Mejor es el pesar que la risa; porque con la tristeza del rostro se enmendará el corazón.
4. El corazón de los sabios está en la casa del luto; mas el corazón de los insensatos, en la casa en que hay alegría.
5. Mejor es oír la reprensión del sabio que la canción de los necios.
6. Porque la risa del necio es como el estrépito de los espinos debajo de la olla. Y también esto es vanidad.
7. Ciertamente la opresión hace entontecer al sabio, y las dádivas corrompen el corazón.
8. Mejor es el fin del negocio que su principio; mejor es el sufrido de espíritu que el altivo de espíritu.