10. Y cuando la nube se apartó del tabernáculo, he aquí que María estaba leprosa, blanca como la nieve; y miró Aarón a María, y he aquí que estaba leprosa.
11. Y dijo Aarón a Moisés: ¡Ah! señor mío, no pongas ahora sobre nosotros este pecado, porque locamente lo hemos hecho y hemos pecado.
12. No sea ella ahora como el que sale muerto del vientre de su madre, consumida la mitad de su carne.