Lucas 9:32-37 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

32. Y Pedro y los que estaban con él estaban rendidos de sueño; y cuando despertaron del todo, vieron la gloria de Jesús y a aquellos dos varones que estaban con él.

33. Y aconteció que, al apartarse ellos de él, Pedro le dijo a Jesús: Maestro, bueno es que estemos aquí; hagamos tres enramadas, una para ti, y una para Moisés y una para Elías, sin saber lo que decía.

34. Y mientras él decía esto, vino una nube que los cubrió; y tuvieron temor al entrar ellos en la nube.

35. Y vino una voz desde la nube, que decía: Éste es mi Hijo amado; a él oíd.

36. Y cuando cesó aquella voz, Jesús fue hallado solo. Y ellos callaron y, por aquellos días, no dijeron nada a nadie de lo que habían visto.

37. Y aconteció al día siguiente que, cuando hubieron bajado ellos del monte, una gran multitud les salió al encuentro.

Lucas 9