Jeremías 35:9-15 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

9. y de no edificar casas para nuestra morada, y de no tener viña, ni campo ni sementera.

10. Moramos, pues, en tiendas, y hemos obedecido y hecho conforme a todas las cosas que nos mandó Jonadab, nuestro padre.

11. Pero sucedió que cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, subió a la tierra, dijimos: Venid y vayamos a Jerusalén, por temor al ejército de los caldeos y al ejército de los de Siria; y en Jerusalén nos quedamos.

12. Entonces vino la palabra de Jehová a Jeremías, diciendo:

13. Así ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: Ve y di a los hombres de Judá y a los moradores de Jerusalén: ¿No recibiréis instrucción para obedecer mis palabras?, dice Jehová.

14. Se ha cumplido la palabra de Jonadab hijo de Recab, el cual mandó a sus hijos que no bebiesen vino; y no lo han bebido hasta el día de hoy, por obedecer al mandamiento de su padre; pero yo os he hablado a vosotros, madrugando para hablar, y no me habéis escuchado.

15. Y envié a vosotros a todos mis siervos los profetas, madrugando y enviándolos, para deciros: Vuélvase ahora cada uno de su mal camino, y enmendad vuestras obras y no vayáis tras dioses ajenos para servirles, y viviréis en la tierra que os di a vosotros y a vuestros padres; pero no inclinasteis vuestro oído ni me escuchasteis.

Jeremías 35