17. Entonces, levantándose el sumo sacerdote y todos los que estaban con él, que era la secta de los saduceos, se llenaron de celos;
18. y echaron mano a los apóstoles y los pusieron en la cárcel pública.
19. Pero un ángel del Señor, abriendo de noche las puertas de la cárcel, y sacándolos, dijo:
20. Id, y estando en el templo, hablad al pueblo todas las palabras de esta vida.