21. Pero los hijos se rebelaron contra mí; no anduvieron en mis estatutos ni guardaron mis decretos para ponerlos por obra, por los cuales el hombre que los cumpla vivirá; profanaron mis días de reposo. Dije entonces que derramaría mi ira sobre ellos, para consumar mi enojo contra ellos en el desierto.
22. Pero retraje mi mano y actué a causa de mi nombre, para que no fuera profanado a la vista de las naciones, ante cuyos ojos los había sacado.
23. Y también yo les alcé mi mano en el desierto jurando que los esparciría entre las naciones y que los dispersaría por las tierras,
24. porque no pusieron por obra mis decretos, sino que desecharon mis estatutos, y profanaron mis días de reposo y tras los ídolos de sus padres se les fueron los ojos.
25. Por eso yo también les di estatutos que no eran buenos y decretos por los cuales no habían de vivir.