1 Reyes 10:5-10 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

5. así como la comida de su mesa, y los asientos que ocupaban sus siervos, y la apariencia y los vestidos de los que le servían, y sus maestresalas y los holocaustos que ofrecía en la casa de Jehová, se quedó sin aliento.

6. Y dijo al rey: Es verdad lo que oí en mi tierra de tus cosas y de tu sabiduría;

7. pero yo no creía las palabras hasta que he venido, y mis ojos han visto que ni aun se me dijo la mitad. Tu sabiduría y tus bienes son mayores que la fama que yo había oído.

8. ¡Dichosos tus hombres, dichosos éstos tus siervos, que están continuamente delante de ti y oyen tu sabiduría!

9. ¡Bendito sea Jehová tu Dios que se agradó de ti para ponerte en el trono de Israel! Porque Jehová ha amado siempre a Israel, y te ha puesto como rey para que gobiernes con derecho y justicia.

10. Y dio ella al rey ciento veinte talentos de oro, y mucha especiería y piedras preciosas. Nunca vino tan gran cantidad de especias, como la que la reina de Sabá dio al rey Salomón.

1 Reyes 10